La voz sale dificultosa, es por esa molestia en el pecho, que al aire le cuesta expresarse.
La ira se vuelve pasible en mi y eso realmente me atormenta, sentirme para la mierda y no tener palabras para decirlo, ni pronunciarlo.
En otras épocas me era mas fácil borrar y seguir, hoy no, desde hace ya dos años que no.
Esa esperanza inútil que cada día me hace levantar, para sentir las hojas de esos libros amarillentos sobre las capas de mi cabeza a punto de explotar...
Me reconforta, me reconforta, sí, me reconforta, a tal punto que mas nada quiero que seguir siendo dominado por los dedos que escriben con mis ojos cerrados.
Me gusta imaginar lo que estoy haciendo, aunque, ni siquiera sé... que es lo que estoy haciendo...
¿Vio entrar esa penumbra que rápidamente cubrió de nubes los cielos que nos tapa este húmedo techo? Yo no, no las vi. Y así sucede con la mayoría de las cosas, uno no las ve, hasta que las sufre.
Cuando era frío, me quebraba, me derretía. Ahora me aborrezco. ¿De que sirve demostrar cosas que al remitente no le importan?, de nada, imbécil, apréndelo de una buena vez.
Será cuestión de meter tosas esas cosas en el mortero, y arrojarlas bien lejos, incluido el mortero, que dicho sea de paso, no se para que lo incluí.
Será que debo frustrarme, y pasarme la vida disfrutando de los placeres de la soledad, que en otro tiempo, le reservé lo mejor.
Ven, Ve, y oye que hoy me verás que quebrar las raíces de este árbol que jamás creció, no maduro, ¿frutos? No dio..., ¿sombra?¿aire?¿refugio...? menos aún...
Definitivamente no se para que sirvo, y ya..., estoy arto de intentarlo... “bueno para nada” seria algo casi perfecto, pero ni siquiera me permito ser “nada”...
Romper romper romper romper romper romper romper romper o con palabras es lo único que puedo hacer...
Y ni siquiera, sé que es lo que quiero/puedo/debo romper...
Chau, me voy al roxbury
jaja
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