jueves, 3 de julio de 2008

Cierras los ojos, y junto a la almohada, los sonidos se intensifican, al escuchar tu respiración sientes música, acordes, cantos, es en tu respiración que de repente sientes repetir detalles que no oíste en mucho tiempo, por eso ven, oye, escucha, oye ven y escucha, ven y siente, ven y siente respirar, ven y respira mi sentir, ven y escúchame respirar al sentir, ven y escúchame respirar y sentir que puedes venir.

Es la respiración que retumba en tu cabeza.

Es tu cabeza que se desangra respiración mediante.

Puedes volcarle agua hirviendo y gritar, gritar y gritar, correr, salir y no volver jamás.

Vas a llorar, te vas a morder los pies hasta lastimarlos y dejar huellas de sangre al caminar, me volveré depredador y seguiré el aroma de tu sangre en el barro.

Golpear, madera con madera, los brazos tensos, la mirada fija, las piernas firmes, es un empate no hay razón.

Es fuego, fuego, fuego, ven que es fuego, no traigas, el agua, no la traigas por que la lloraste demasiado.

Mentira, no te creo, basta. Sos culpable de tu inocente sonrisa, y basta, no la vuelvas a mostrar frente a mi, no, alejate, salíí!!!!

Para de correr detrás de mi, no... mejor no. Seguí por que de repente todo cambio, en el momento en que nuestros pasos coincidieron y golpearon el suelo con el mismo sonido. Ya no hay ruidos, solo música, solo música... Y es la misma que sale de tu respiración, esa que una mañana me despertó y por la noche no me dejaba dormir.

Es tu respiración mi música.

Es tu respiración mi música.

Es tu respiración mi música.

Es grabe tu reír y dulce cuando toces.

Que te parece si... ¿nos encerramos en una burbuja de vidrio hasta que la condensación de nuestro vapor la rompa?

O podemos... Hacer un pozo en el parque esta noche, llenarlo con agua y mañana pasar el día desnudos ahí dentro...